Declaración del secretario general de la FSM, George Mavrikos, contra el golpe de estado en Bolivia

La Federación Sindical Mundial (FSM) condena el golpe contra el Presidente electo de Bolivia, Evo Morales.

Denunciamos ante la clase obrera mundial el papel sucio de los EEUU y de la Organización de Estados Americanos (OEA) así como de las fuerzas reaccionarias de Bolivia que han organizado el golpe fascista.

Ese golpe contra el pueblo de Bolivia confirma que el imperialismo actúa sin escrúpulos. En Bolivia se vuelven a implementar casi los mismos métodos que en Chile, durante el golpe de estado del dictador Pinochet; cuando Salvador Allende quedó ahí y luchó contra los golpistas, convirtiéndose en un símbolo heroico.

Expresamos nuestra solidaridad internacionalista hacia la clase obrera, los indígenas, campesinos y el pueblo de Bolivia que resiste contra el golpe y los títeres de los imperialistas.

Exigimos que paren de inmediato los asesinatos, los secuestros, los incendios provocados contra los y las que defienden el derecho de los pueblos a decidir democrática y libremente sobre su presente y su futuro.

Llamamos a los sindicatos afiliados y amigos de la FSM en Bolivia a seguir en la primera línea de la lucha, informando al pueblo que el golpe fue consumado para que los capitalistas pillaran las riquezas y destruyeran la civilización de Bolivia.

En nombre de los 97 millones de nuestros afiliados en 130 países de los cinco continentes, sumamos nuestra voz a la de los pueblos que resisten contra los imperialistas y creemos que es una buena oportunidad para que los que todavía tienen ilusiones y creen en la colaboración clasista saquen sus conclusiones, si son capaces de hacerlo.

La lección que nosotros mantenemos es que la lucha clasista continúa. Nunca para.

George Mavrikos

Secretario general FSM